La red de telecomunicaciones de un ISP (Proveedor de Servicios de Internet) es en realidad una interacción de diversos tipos de redes, dentro de las que puede destacar LTE (4G) como una red de acceso al usuario final. El flujo de información que llega al usuario, atraviesa diversas infraestructuras por las que el proveedor de servicios realiza el tránsito de los datos, bajo esta perspectiva se comentarán algunos de los puntos necesarios de tener en cuenta a la hora de asegurar la QoS (Calidad de Servicio) en este tipo de entornos.
Desde el punto de vista de gestión, LTE permite definir perfiles y clases de servicios, los cuales son claves cuando se negocian los requerimiento de QoS del móvil durante el establecimiento de una comunicación, el tránsito de los paquetes durante la misma, incluso en los traspasos. Sin embargo, para asegurar la QoS extremo a extremo es necesario tener en cuenta tanto la red de acceso como la de transporte.
Red de transporte
Un escenario típico de un proveedor se servicios de Internet podría describirse como se muestra en la Figura # 1, en ella se puede ver como LTE solamente forman parte de la red de acceso de un proveedor. El ISP posee diversos tipos de redes de acceso, en función de los servicios que brinda. Toda la infraestructura necesaria para el transporte de la información proveniente de las redes de acceso, debe de transitar por el núcleo de red, éste también se interconecta con otros tipos diferentes de redes, donde usualmente se ubica el servicio final al que el usuario desea acceder (Internet, PSTN, servicios ftp, video streaming, voz u otros).
Figura # 1. Topología simplificada de un ISP [2].